RECUERDOS BORRADOS (parte 2)

JACOB P.O.V:

Me concentré en recordar cómo debía caminar sin voltear a mirar a Alex. Busqué desesperadamente otra cosa en que ocupar mi mente o caería de nuevo en la tortura de mirarla y desearla, para luego tener que dejarla ir . Estaba seguro que solo debía querer a Bella… ¡Hablando de Bella!, me indigno sentir la esencia de la sanguijuela dentro de casa ¿No se suponía que se había ido?. Obviamente no. No la dejaba ni respirar le estaba absorbiendo la vida y pronto se la quitaría definitivamente. Me asombré al notar que esa ideas al contrario de cómo sucedía siempre no me taladraba el corazón, solo me disgustaba por que Edward fuera una sanguijuela…En el fondo, muy en el fondo sabia que se debía a la proximidad de Alex, ella estaba aferrada a mi cuerpo para no caer y yo cada dos segundos la acercaba mas de lo necesario, aunque en si la necesitaba, desde que apareció necesitaba tenerla cerca, olerla sentirla…MIA… retumbo mi mente al tiempo que atravesaba el umbral de la puerta con ella, ¡no claro que no!, ¡solo podía pensar así de Bella!, me obligué a mirarla, tan madura y responsable atendiendo a toda su familia. Bella era confiable, tierna cálida y leal, ante todo madura pero fue entonces cuando tuve el impulso de desviar mi vista hacia a Alex y verla tan hermosa, extrovertida y carismática, justo lo opuesto a Bella y eso me enloquecía, ¿cómo pude confundirme tanto de un día para otro? Me pregunté y recordé lo que sutilmente me dijo mi padre…”Claro que Bella es madura, de hecho más de lo sano para su edad, por eso encaja con Edward Cullen, él desde que tu abuelo lo conoció es moderado, de no ser un vampiro lo respetaría bastante, tú en cambio necesitas un alma mas libre como la tuya, un ser que no te ate a la madurez ,que jamás ganarás, un ser que comparta tu espíritu. Es más cuando nace un lobo, deja a un lado su otra mitad para que luego ella venga al mundo y se encuentren en el milagro de la imprimación”

BELLAP.O.V:

Alex y Jake estaban demasiado raros sin mencionar que Edward cada vez que estaba ceca de ellos dibujaba misteriosas sonrisas y suspiros de resignación. Me preguntaba que podía leer en sus mentes. Vi como Jake llegaba a la mesa de la cocina con Alex en brazos y delicadamente la depositaba en la silla como si temería romperla, de hecho me recordaba a la forma en que Edward me llevaba a la enfermería ya hace bastante tiempo, cuando olí la sangre en la clase del señor Banner. ¡ok! Bella estás delirando; Edward se debatía entre el amor y la sed, no es como si Jake se debatiera entre amar a mi prima e ignorarla..me dije, alejé esa estúpida suposición inmediatamente de mi mente. Era absurdo con ,lo mal que se llevaban pero de nuevo recordé como inicio mi historia con Ed, acaso les sucedía lo mismo y si era así ,¿yo podría afrontar ver día a día a mi Jake con mi prima?...debía alejar esos pensamientos de mi mente ,no me hacían bien así que me concentre en terminar de servir la cena. Contra más rápido cenáramos mas rápido podría estar junto a Edward, que estaría como cada noche esperándome, perfecto sobre mi descolorida cama, la sola perspectiva de verlo me alegro y sonreí estúpidamente mientras llenaba el plato de Eric que miraba suspicaz a Jake, mi padre estaba muy ocupado charlando con Joni sobre el último partido trasmitido por la tele y apenas había saludado a Jake, en definitiva cada miembro de la familia tenia su universo personal, yo solo debía concentrarme en el mío, llamado Edward Cullen, aunque justo ahora no pudiera apartar la vista de Jacob que miraba de reojo a mi prima.

La comida trascurría con naturalidad, Alex tímida solo alzaba los ojos de su plato lo necesario, Jake tenia un extraño tic en el cuello por que daba impresión que pretendía girar la vista hacia mi prima pero ,como si fuera una reacción severa, acomodaba de nuevo violentamente su cabeza mirando hacia el plato y de vez en cuando me dirigía sonrisas nerviosas a mi. Mi padre como todos los días estaba demasiado absorto en masticar y tragar y Eric había cambiado su alegre expresión por una meditabunda, me preguntaba que le sucedía, pero pronto me saco de la duda cuando de improvisto golpeo la mesa y miro fijamente a Charlie antes de decir —¡¡Tío, me voy de la casa!!— todos nos atragantamos con lo que estaba en nuestras bocas, por un segundo trate de recordar a Maniobra de Heimlich, hasta que Alex consiguió hablar —¡¡¿qué dices?!!— fue lo único que se escucho. Fué un grito realmente ensordecedor Jake se tapo los oidos con las manos, mientras Eric ponía las manos en alto como signo de rendición y pedía que lo dejaran hablar. Mi padre solo lo observaba con ojos llenos de desaprobación y sospecha —Veréis, creo que es evidente que soy una persona adulta y responsable; generalmente estoy pendiente de mis hermanos y realmente, tío no deseo ocasionar molestias, ya me he comprado una casa donde podré tener la independencia que un chico como yo necesita, ya sabes, Charlie, soy como tu; un lobo solitario— no puede evitar esbozar una sonrisa ante las palabras de mi primo, era tan bipolar, casi al mismo grado que Edward, tal vez por eso se llevan tan bien.

¿Y nosotros, Eric?- Dijo mi primo menor- Bueno… tendréis vuestras habitaciones para cuando me vengáis a visitar.- Eric acarició el pelo de Joni. Desvié la mirada para ver la reacción de mi prima. Solo miraba a su hermano con rabia.- ¡Oh vamos renacuaja! ¿No te me vas a poner sentimental, No?- Alex hizo una mueca. Eric se dirigió a hacía ella. Alex lo abrazó.- Mas te vale que mi habitación sea una de las más grandes- dijo entre sollozos. Realmente Alex y Eric estaban muy unidos. Tenía envidia de mis primos, yo era hija única y siempre había deseado un hermano. Volteé a mirar a Jacob. En su mirada había desconcierto y miraba a Alex abrazada a su hermano. - ¡Oh bueno, bueno chicos! Ya es hora de ir a la cama, ¿no creéis?- Eric asintió y agarró a Alex por sorpresa y se la cargó como si de un saco se tratara. - ¡Me voy a comer un saco de patatas!- Me di cuenta que le hacía cosquillas. Alex reía, parecía una cría de 3 años con su padre.- ¡Eric ya basta!- se reía. Dibujé una sonrisa en mi rostro y miré a Jacob de reojo. ¡Había dibujado una risa torcida!- ¡Eric!- Eric reía a carcajada limpia mientras la llevaba a cuestas hacía el desván. – ¡Atácala hermano!- Joni se levantó de la mesa y corrió detrás de sus hermanos, divertido.- ¡Jacob, si quieres tenemos sitio de sobra arriba en el desván!- dijo mi padre riéndose de sus sobrinos- ¿Eh? ¡Ah! … No gracias Charlie, creo que … iré a dormir a mi casa, pero gracias por la oferta. Jacob me ayudó con la mesa.- Gracias Jake…- No quería que se fuera. Pero … ¿Por qué? … ¿Por qué esta sensación?- Buenas noches Bella- Dijo dándome un beso en la mejilla. - ¡Jacob!- exclamé al verle atravesar la puerta- ¿Si?- Hice una mueca.- Nada, déjalo….

Cerró la puerta y pude oír el motor de su moto negra alejarse. Suspiré. Dirigí la mirada a las escaleras, y me dirigí a mi habitación. Allí esta él, perfecto como siempre.

Pasaron dos semanas desde ese día. Alex y mis primos se pasaban el día en La Push, y cuando no estaban allí, Paul estaba en casa junto con Embry y Quil, Alguna vez venía Jacob, pero la verdad eran más bien pocas.

Me levanté contenta. Iba a ser un gran día para mi, los Cullen y mis primos iban a estar juntos; incluida Clarise, mi nueva prima neófito, se controlaba bastante la sed gracias a los entrenamientos de Jasper. Emmett estaba con mi prima embobado, insistía a Rosalie en quedársela como mascota, según él, Alex era muy … ¿mona?.

Edward me besó el cuello. Me estremecí.- Vamos Bella, vida mía, vístete. Pronto os vendremos a buscar para ir a casa de Eric.- me giré y le besé en los labios.- ¡No tardes en regresar!- le dije en un susurro. Él sonrió y me separó un mechón del pelo justo detrás de la oreja. En un segundo Edward desapareció. Me dirigí al baño para dedicarme 4 minutos humanos.

Me dirigí al salón. Mis primos vestidos con ropa vieja y chaquetas en mano me esperaban. Sonreí. Seguramente sería un día genial. En menos de un minuto el timbre de la puerta principal sonó. Abrí la puerta de un salto. Allí estaba, mi novio y la mayoría de los Cullen. Faltaba Carlise y Esme. Clarise entró de golpe pero no me abrazó solo me dedicó una sonrisa. Sabía que no debía permanecer durante mucho tiempo a mi lado, por el simple hecho de tener una insaciable sed de sangre, nada más. Miró a sus hermanos y a ellos no pudo evitar darles un abrazo, corto, pero un abrazo.

Salimos en dirección a los coches. Emmett se abalanzó encima de Alex. –Me estás ahogando Emmett- dijo Alex entre risas. – ¡¡¡Es que eres tan mona!!!- Rosalie los observaba con desprecio. Nos montamos en el coche y nos dirigimos a la frontera entra La Push y Forks.

Allí estaba la casa de Eric, era pequeña, pero hermosa. Aparquemos y saquemos los botes de pintura.- ¿De qué color quieres el salón Eric?- le pregunté- Quizá de un color carne amarillento- Dijo sonriendo y sin dejar de mirar a su hermana Clarise. Sin duda el estar juntos le hacía feliz.

Empezamos a pintar por el piso de abajo. Llevábamos un rato trabajando cuando se oyó un chillido.- ¡Joni!- Joni había empapado de pintura a Clarise y se reía. Esta se vengó con un brochazo de pintura blanca. Joni rio y mojó el pincel en la pintura y lo sacudió, dando, esta vez a Alex. Esta que era mucho más bruta, y con el pie ya curado cogió uno de los cubos y corrió a lanzárselos a Joni. Joni se agachó y sin querer la pintura mancho a Edward. - ¿Qué demonios?- Exclamó. Pude sentir la risa de Alice y los demás. Intenté aguantar la mía, hasta que no pude más. Edward se enfureció y salpicó a Alice. - ¡Bella ponte a salvo!- Dijo Edward entre risas. Pero era demasiado tarde Eric acababa de pintarme el jersey y corrí ha vengarme.

Estaba todo muy divertido cuando de pronto Alex y los Cullen se pararon en seco. - ¡Están enfadados!¡vienen hacía aquí!- dijo Alex. ¿Quién venía?- Se oyó el timbre de la puerta. Eric se apresuró a abrirla.-¡Sam!- se sorprendió. Eric salió por la puerta cerrándola justo después. Alex, a pesar de eso, la abrió y salió, los demás la imitamos. - ¿Qué se supone que haces Eric?- Dijo Paul- ¿De qué parte estas?- añadió.- Eric estaba temblando y la mandíbula muy apretada.- Estamos en la frontera no hemos traspasado la línea.- dijo Clarise en defensa de su hermano.- ¡Oh habló la asquerosa neófita!- no logré alcanzar saber quien soltó tal blasfemia.- ¡No te metas con mi hermana saco de pelo!- Dijo Joni.- ¿Ya ves Bella?¡Has conseguido que uno del clan prefiera a tus sucios parásitos…!- me sorprendí. Era mi Jacob- ¿Qué estás diciendo Jacob?¡No le hables así a Bella o me obligaras a matarte!- Dijo Edward en mi defensa.- ¡Paul, tranquilízate!- dijo Alex al ver lo alterado que estaba su amigo.- ¡No creo que sea para tanto!- Lo que había iniciado como un día genial estaba desencadenando una batalla. Paul pareció intentar calmarse.- ¡Tu cállate Pulga asquerosa!- Jacob sí que estaba furioso. No entendía el por qué. . ¡A mí no me mandas callar!- Todo pasó muy rápido. Eric se había trasformado y Paul también y se disponían a luchar. Alex chilló- ¡Los Cullen Largaros si no queréis iniciar una guerra!¡ No podré retenerlos por mucho tiempo!. Me di cuenta que Alex decía eso tarareando. Estaba utilizando su poder. Edward me agarró. Los Cullen se dirigieron a sus coches y obedecieron a Alex. Mi prima Clarise se marchó con ellos. Edward, sin embargo, se quedó con migo.- Vamos Bella- me ordenó.- Pero…. – no quería dejar a mis primos…. a Jake… peleándose. Puse notar como Sam ordenaba a los demás retirarse y estos obedecieron. Eric y Paul se adentraron en el bosque luchando el uno contra el otro. Alex no los siguió, solo agitaba el rostro en forma de negación. Jacob se quedó y empezó a aplaudir- ¿de qué te ríes Jacob?- le preguntó Joni con furia.- ¡Enhorabuena Bella!¡Felicidades de verdad!¡Has conseguido que luchemos entre nosotros!- Edward soltó un gruñido e hizo símbolo de avanzar. Lo frené.- ¡Jacob basta ya!- Jacob rió- ¡todo el mundo prefiere a tus sanguijuelas!¿Estarás contenta no?-Sam apoyó su mano al hombro de Jacob- ¡Vámonos Jacob!- Jacob hizo una mueca- ¡No, Sam!- Alex lo miraba con odio.- ¡Incluso la pulga prefiere pasar un día con ese grandullón!- Supe perfectamente a quien se refería. Emmett y Alex des de que se conocieron estaban muy unidos.- ¡Enhorabuena Bella de verdad!- Mi furia aumentaba. Como soltará otra idiotez no respondía de mí. - ¿Qué es lo próximo? ¡Dime Bella!- ¡ya estaba harta!- ¿Qué pasa Jacob? ¿Te molesta que haya elegido a Edward? ¡aprende a vivir con ello!- Alex me miró asimbrada. Me arrepentí al instante de haber dicho eso en voz alta. A Edward, pero, no le disgustó y Joni me aplaudió.- ¡Pues mira, si , me jode que lo eligieras a él! ¡Perdona por no ser “Don perfecto Cullen”!- exclamó. Avancé unos pasos- ¡Jacob espera! ¡yo no…!- No quería haber dicho eso, no quería herirlo, pero me había sacado de mis casillas.- ¡Déjame en paz Bella!- Jacob desapareció entre los árboles. - ¡aleluya!- dijo mi primo. Me sentía ruin, despreciable. ¿Cómo se me pudo ocurrir decirle eso?- ¡Edward ves a buscarlo!- exclamé. Jacob estaría a kilómetros de distancia, con mi paso de caracol no lo alcanzaría. Necesitaba pedirle perdón. Edward me miró con descontento.- Bella, no puedo… se ha adentrado en territorio Quileute.- dijo con expresión dolorosa al no poder cumplir mi deseo. Edward miró a Alex- ¡Ah no! ¡No, no, no, Edward no pienso ir tras él!- ¡claro Alex tenía la rapidez de un cazador, seguramente lo alcanzaría.- ¡por favor Alex!- le supliqué. Me miró con resignación y empezó a caminar en dirección al bosque.- ¡ESTO SOLO ME PASA A MI, UNA CAZADORA OBEDECIENDO A UN VAMPIRO!¿PUEDO SER MÁS RARA?.

ALEX P.O.V:

Al adentrarme en el bosque empezó a lloviznar. ¿Qué más me podía pasar?. Tropecé- ¡Gen Swan no te he ordenado que te actives!- dije en voz alta. Estaba empapada de barro. Divisé una silueta sentada en la raíz de un árbol. Era Jacob y estaba mojado.-¡Malditas hormonas!- pensé- ¡Eh, Tú, Perro!- Me acerqué. No me miró. – ¡¡AHHHHHHHH!!- Chillé.- ¿Estás… estás…estás….?- Me puse colorada como un tomate- ¿Desnudo?- seguramente Jacob se había transformado de la rabia contenida y vuelto a su forma humana poco antes de llegar yo.

(Idea original de Stephanie Meyer// Idea del Fic: Ann, Vero y Ale)