DUDAS (parte 3)

lunes, 18 de agosto de 2008

 


La verdad no me importaba que mi padre estuviera al otro lado de la puerta. Estar con Alex era lo verdaderamente importante ahora y era lo que deseaba. Empecé a besar su cuello hasta llegar a su pecho. Noté a Alex distante ya que de pronto su pasión se había esfumado. No entendía que le pasaba últimamente estaba extraña…- ¿Alex, estás bien?- Ella ni tan solo me miró se encogió de hombros.- La verdad es que estoy algo cansada…- me extrañé.- Pero si tú has …- ella había empezado, no entendía nada… - le di un beso en la frente y me coloqué a su lado.- ¿Seguro que es solo eso?- ella sonrió y asintió.- Solo tengo sueño…- Se acurrucó y cerró los ojos. La observé durante largo rato. Mientras le acariciaba el hombro y notaba su respiración cada vez más profunda los ojos empezaron a pesar.

ALEX P.O.V:

Sentía que esto no estaba bien. Amar a Jacob no estando segura de si él sentía lo mismo no era lo correcto. Necesitaba explotar. Mientras me hacía la dormida noté los primeros y adorables ronquidos de Jacob. Me levanté con cuidado y me dirigí a la puerta de su habitación la abrí y cerré con sumo tacto, para no despertarle. Me dirigí al lugar donde yacía mi mayor y más preciado deseo.- Cierra los ojos-me dije a mi misma.- Hablas muy bien el inglés para ser española.- La voz de Jacob resonó en mi cabeza.- ¿Sabes? jamás había visto unos ojos tan bonitos. Tienen un color esmeralda que me recuerdan a la tercera esposa…- La canción que Jacob me cantó ocn referente a la leyenda de Taha Aki resonó en mi cabeza. Me senté en la roca y comencé a llorar mientras la tarareaba.

JACOB P.O.V:

Me desperté al no sentir a Alex a mi lado. Salí de mi habitación alterado y me dirigí al patio. Sentí unos sollozos. Me asomé. Vi a Alex acurrucada en aquella piedra donde empezó todo. Alex tatareaba una canción muy familiar para mi- Allí va un lobo ayudando a la luna, las nubes tristes lloran, pues su gran amor se ha ido. El espíritu vagará eternamente hasta de nuevo su verdadero amor encuentre el espíritu del lobo ayudaba, ya que los ojos de su amor no encontraba, aquellos ojos verdes, aquellos ojos verdes- Intenté mirarla pero pise una pequeña rama. Alex levantó la cabeza de golpe y se dispuso a ir. Corrí tras ella y la agarré del brazo. -no vas a ir a ningún lado hasta que me expliques que es lo que te pasa- giré su cuerpo hacía el mío, pero Alex agacho la mirada – no pasa nada Jacob, de verdad – no le creí nada - si claro, primero me dices que tienes sueño, luego te sales fuera de casa sin decir nada y te encuentro aquí llorando sobre nuestra roca... – seguía con la mirada agachada, agarré su cara con las manos y se la levante. Miré sus hermosos ojos, llorosos - Alex, por favor, dime que te ocurre – Alex me quito las manos de su cara lentamente, volvió a agachar la cabeza y tardo un rato para volver a hablar – tengo la regla – me crucé de brazos – si claro… - dije sin dejar de mirar su cabello negro como la noche – ¿y eso explica el porqué querías huir de mi? – se encogió de hombros sin decir nada mas… suspiré – pues si no me dices que te ocurre no te puedo ayudar, haces que… – no lo quería decir, pero tenía que saber que le ocurría – haces que sienta que no confías en mi… - funcionó. Después de decir eso me abrazo y se acurruco en mi pecho, la rodeé con mis brazos – y bien.. ¿me dirás que te ocurre? – sentí los brazos de Alex mas aferrados a mi – solo dime que me quieres… - me sorprendió que me contestara eso, pero claro que se lo diría- Alex, te amo más que a mi vida– le bese su cabello mientras se lo acariciaba – gracias.. – dijo casi en un susurro- duramos abrazados cerca de 1 min sin que ninguno dijera ni una palabra – ¿te sientes mejor hermosa?- pregunté. Alex asintió con la cabeza acurrucándose aun mas en mi pecho. De pronto escuche un sollozo...

… separe su cabeza de mi pecho y le levante la cara suavemente, vi que de sus hermosos ojos verde esmeralda caían lagrimas.. – pero… ¿por qué lloras? – le limpie una lágrima que caía por su mejilla – porque soy idiota.. – Arrugue el morro – claro que no lo eres... – empezaba a desesperarme tenía que saber que le ocurría… – Alex, ya dime que te está pasando – se lo dije con un tono de voz alto, de nuevo Alex agacho la mirada y trago saliva – es solo que… tengo miedo de perderte.. – le volví a levantarle la cara, quería que me mirara a los ojos- escúchame bien Alex, nunca.. nunca me vas a perder, yo ya soy tuyo.. – le bese la frente y la abracé fuertemente – eso lo dices ahora – la separe de mi cuerpo agarrándola por los hombros – ¿Qué? ¿Por qué has dicho eso? – Alex trago saliva y agacho la mirada – no me hagas caso – no lo entendía.. ¿qué le ocurría? – nada de eso Alexsandra, dime porque dijiste eso – arrugue el morro – por nada Jacob por nada.. déjalo ¿vale? – me quito los brazos de sus hombros.


ALEX P.O.V:


De pronto el teléfono sonó. Jacob me miró y se dirigió hacia dentro, lo seguí.- ¿Si?, casa de los Black …- los ojos de Jacob se dilataron.- ¿Bella, estas bien? ¡Tranquila! , dime… ¿qué pasa?- de pronto algo en mi corazón fue atravesado. ¿Se había cumplido mi mayor temor?- Bella, ¡No llores!- Tragué saliva…- ¡Si, tranquila, ahora mismo voy a por ti!- dilaté las pupilas y empecé a temblar. – Alex, Bella ha discutido con Edward debo ir por ella…- Asentí con la cabeza. Era algo inevitable. Me acerqué a él y lo besé como nunca antes.- Cuida de Billy por favor …- Asentí de nuevo. Jacob agarró las llaves de la moto y se desapareció detrás de la puerta. Mi mayor temor cobraba vida y mientras yo sentía como poco a poco mi corazón dejaba de latir.


BELLA P.O.V:


Edward me había suplicado, que él tan solo trataba de ser amable. Hoy en la tarde fuimos con Ángela, Ben, Mike y Jess a la heladería. Charlie seguía insistiéndome sobre lo del “equilibrio” y esta vez Edward acepto acompañarme. Mala idea. Edward se había pasado todo el rato riendo junto a Ángela, hablando sobre todas las cosas que tenían en común, que eran demasiadas, eso hizo que me sintiera desubicada, sentía algo que hace mucho no sentía.. algo que quemaba en mi interior… Edward estacionó el volvo frente a mi casa, la patrulla de Charlie no estaba ya que me dijo que trabajaría hasta tarde, después de abrirme la puerta de su volvo, como siempre, se encamino hacia la entrada de la casa, dentro me empezó a hablar sobre Ángela de lo interesante e inteligente que era.. por un momento sentí miedo de perder a Edward… Empecé a reclamarle del porque era así con Ángela si jamás se había acercado a otra humana, que si tanto le caía bien, que fuera con ella… Me sentía una cría celosa y estúpida. Termine sacándolo de mi casa, sabía que no se iría, estaba destrozada, necesitaba de alguien, no, no a alguien, necesitaba a mi sol particular, lo había llamado hacia un rato y no tardaría en llegar, me asome por la ventana y vi a Edward recargado en su volvo…Me dirigí hacia la cocina a dejarle una nota a Charlie diciéndole que iba a pasar la noche en casa de los Cullen, que Alice me había invitado a su pijamada, seguro lo creería. De pronto sentí la puerta. Corrí a abrirla. Era Jacob. Lo abracé instintivamente. – Gracias por venir – le dije sollozando – No hay de que Bella, vamos a mi casa, no puede seguirte hasta allí – asentí con la cabeza, Jake me paso un brazo por los hombros y empezamos a caminar hacia la moto. Visualicé a Edward, seguía apoyado en su volvo plateado con ojos tristes que penetraron y desgarraron mi corazón. Aún así me senté en la moto de Jake y abracé fuertemente su cintura. Jake aceleró, y yo seguía viendo a Edward, deje de sentir su mirada cuando nos encontrábamos lo bastante lejos de mi casa. No podía dejar de llorar.

ALEX P.O.V:

Me encontraba llorando de nuevo en la cama de Jacob cuando una olor repugnante invadió mis fosas nasales. Corrí a la habitación de Billy.- ¿Billy?- Lo vi tirado en el suelo mientras señalaba hacia la izquierda. ¡No podía ser cierto! Desenvainé mi espada y me puse delante de Billy usando mi cuerpo como escudo humano. El Rastreador sonrió. Sentí unos aullidos fuera. – Tus amiguitos los licántropos están entretenidos con los míos…- Sabía perfectamente quien era ese rastreador. Era un enviado de Cayo. Lo miré con odio.- Oh vamos… si que es cierto… tienes los ojos más bellos que he visto nunca … - seguía riendo. – ¿Vas a estar todo el tiempo delante de ese invalido? – me enfurecí. Nadie despreciaba a Billy.- Al menos él no carece de inteligencia. - Lo ataqué. El rastreador Salió corriendo por la ventana. Mi espíritu lobo salió y se colocó al lado de Billy. Esperaba que lograra protegerlo. Seguí al rastreador y visualice a los grandes lobos incluidos Eric y Paul. Para mi sorpresa mi padre y Joni también estaban allí.- ¡PAPA! ¡Billy!- mi padre asintió con la cabeza y se adentró en la casa junto con Joni. Había muchísimos vampiros. Sin duda Cayo estaba harto de esperar.- Realmente no me extraña que Cayo te deseé tanto cazadora …- arrugué el morro de asco. El ruido del motor de la moto de Jacob era cada vez más claro. Vi a Jacob frenar de golpe e inclinarse transformándose en un lobo rojizo. Bella iba justo detrás.- Vaya que olor tan apetecible…- dijo mi enemigo y saltó hacía la dirección de Bella. – ¡BELLA!- dije mientras corría a su lado. La agarré de la mano y me dirigí hasta el bosque con tal de ponerla a salvo. No fue una buena idea. - ¿Alex, qué está pasando?- Tragué saliva y negué con la cabeza mientras corría. - ¡Alex!- Frenamos en seco el rastreador se encontraba justo en frente de nosotras.

(Idea original de Stephanie Meyer// Idea del Fic: Ann, Vero y Ale)


0 comentarios: