BELLA P.O.V:
Dilaté las pupilas al percatarme del brillo que empezaba a emitir el collar.- ¡Alex, Cálmate!- Alex no dejaba de mirar con odio a Andrew, des de la primera vez que lo vio ya supe que no confiaba en él.- Alex, por favor, debo hablar contigo.- Alex suspiro, pero sin dejar de mirar a Andrew.- ¡Lárgate!- la voz de Joni apuntó a Andrew. Andrew lo fulminó con la mirada pero desapareció al instante.- Joni, te agradecería que… bueno guardaras eso.- Señalé la enorme espada que acababa de desenvainar. Joni me obedeció y se dirigió a donde Emmett, seguramente para una pelea amistosa. Alex se sentó a mi lado- No confío en él.- mi prima miraba al suelo mientras murmuraba algo que no conseguía entender. De pronto me miro.- ¿Qué ocurre Bella?- suspiré. Sabía que era a la única que podía confiar todo lo que me pasaba, la única familia que tenía y la única que me entendería. Bajé la mirada.- Verás, oculto algo a Edward.- Ella agarró mi mano y esperó a que continuara.- Sé que debería decírselo, pero tengo miedo de su reacción.- Esperé a que me preguntará que era, pero no lo hizo, tan solo me escuchaba.- No sé qué hacer. Edward siempre es tan bueno con migo, y ocultarle esto me duele.- Esperé algún reproche, pero nada.- Alex, ¡no sé qué hacer!- Alex suspiró y me abrazó.- Bella, si no me dices que es, difícilmente puedo aconsejarte.- No podía hacerlo pero el dolor me mataba, debía decírselo a alguien. Tenía miedo. Me acurruqué en Alex y las lágrimas salieron como gotas de lluvia. Alex acarició mi cabello.- No te preocupes primita, yo te ayudaré ¿sí?- levantó mi barbilla me colocó el pelo bien y secó mis lágrimas.- No llores que te pones muy fea- rió. No pude evitar sonreír ante su comentario.- Ves así está mejor.- Sin duda Alex era la hermana que siempre quise tener. Era terca y orgullosa pero en el fondo dulce y comprensiva; una mezcla que hacía cogerle un cariño especial.- Si quieres puedes decírmelo, guardare el secreto lo mejor que pueda.- Sabía a qué se refería, lo guardaría hasta que Edward escuchara sus pensamientos. Suspiré.- Alex, mejor olvídalo no quiero involucrarte en esto.- Arrugó el morro, pero era cierto, bastantes problemas tenía mi prima como para cargar con los míos. Me volvió a abrazar. Agradecía su comprensión y su apoyo. Esto tenía que solucionarlo yo.
ANDREW P.O.V:
como por inercia llegue al riachuelo que había junto a la casa, solo ahí podía encontrar algo de la tan esquiva paz que a lo largo de los siglos siempre desee, aquí estaba solo, como siempre, Alex me despreciaba no confiaba en mi, solté una carcajada irónica, que había de diferente en eso?, siempre había sido así, jamás nadie se me había acercado o mucho menos…amado, esa solo era mi vida, vagar solo, siendo temido y repudiado, en vida solo fui un bastardo con miles de obligaciones, hijo de un tirano, con la semilla del mal recorriendo mis venas, un hombre a quien las mujeres solo buscaban por como lucia para una noche efímera pero jamás para amar de la forma en que siempre anhele y como eterno maldito, mis poderes eran sorprendentes, jamás nadie los había contemplado, a pesar de todo, quería ser aceptado y siendo vampiro y tras escapar del infierno de la trasformación creí posible serlo; por lo cual, demostrar lo diferente y poderoso que era incluso entre los raros no me convenía, claro la idea de aceptación solo duro 2 horas luego encontrarme con más de nuestra clase Steve siempre sintonizo bien con los demás, yo no, jamás se me acercaron para solo hablar, me trataban como a una paria, un bastardo tal y como lo hicieron antes de la noche eterna y justo ahí comprendí, que no había nacido para el amor, las furias y destinos hilaron mi vida solo para ser temido y aprendí bien la lección, nadie entraría jamás a mi corazón, nunca esperaría nada de los demás salvo lo peor así no sería posible ser lastimado, pero ahora y contra mi voluntad, apareció esa niña para recordarme el único ser que siempre me contemplo con cariño Amanda fue mi adoración, no había nada que no hiciera por ella, pero no la salvaste bastardo!! Grito mi mente, y ese trágico día me perseguirá por las eternidad, Alex me hacia recordar las emociones olvidadas, las ansias de amor fraternal, la postura de guardián y ser repudiado por ella me dolía en un lugar que jamás creí posible de nuevo, su desprecio lastimaba mi alma maldita, pero también estaba Bella, ella con su inocencia, su valor y lealtad me hacia anhelar cosas que jamás tendría, “su amigo” acaso eso era posible? Acaso de verdad me veía como eso?—Sabia que aquí podría encontrarte— la vos de Tanya sonó a mi espalda, sin decir más tomo asiento a mi lado —jamás me ha gustado cuando te apartas, me da la impresión que solo te torturas, eso la verdad me duele— las palabras de Tanya me sorprendieron, acaso todos estos años se había dado cuenta de mi soledad?, la lastimaba?, algo andaba mal en mi hoy por que definitivamente no comprendía sus palabras—que quieres de mi Tanya?—Andrew, alguna vez dejaras que vea lo que piensas en realidad?, se que sufres, todo este tiempo lo he sabido, pero tú solo lo ocultas; has levantado un muro entre el resto del mundo y tu, déjame entrar en ti, déjame saber que pasa, por favor, habla con migo— decía calmadamente mientras acariciaba perezosamente mi mejilla, esto no podía ser real, Tanya me estaba diciendo que siempre había estado pendiente de mi, era como si ella en realidad si deseara saber qué me pasa, como si se preocupara por mí, Estúpido claro que no, jamás nadie te amara, a ella no le importas!! Rugió de nuevo mi cerebro, claro que no, para Tanya solo debía ser un buen amante como lo fui para todas las demás, era solo piel ella en verdad amaba a Edward Cullen, solo pensar en su nombre desgarro mi odio, el era “perfecto”, hundido en su auto repulsión solo como fachada, con su actitud de “soy un emo cuidado con migo trato de suicidarme pero fallo”, realmente me judía que todo le saliera bien, que fuera respetado…querido, no, la verdad me dolía que Tanya lo amara, que cuando llegue a Denali ella estuviera entregada por completo a conquistarlo y que yo como el idiota que siempre he sido me enamorara de ella cuando solo sufriría—Tanya por que mejor no vas y buscas a tu gran amor Edward y aprovechas que Bella esta con su prima?, no sé, móntale algún numerito de damisela en apuros o algo así y me dejas a mí en paz, vale?— le dije mas mordaz de lo que un inicio pretendía—Tu inútil bastardo, vengo aquí por que sentí que me necesitabas, pero claro el señor “yo macho man hago todo solo” es demasiado orgulloso para entenderlo verdad?, jodida la hora en que me preocupo por ti—, la indignación de Tanya me sorprendió, estaba…dolida?, no entendía el motivo, solo le había dicho que fuera donde su gran amor—Haber Tanya, que lio formas solo porque te digo que vayas y trates de conquistar a tu novio emo, acaso eso no es lo que siempre has deseado?, no me trajiste aquí para ayudarte con eso?— pregunte con real interés, Tanya actuaba como si cada palabra fuera ajena a ella—Mira grandísimo idiota, vinimos a este apestoso pueblo solo porque pensé que querías acabar con Edward y que al hacerlo serias medianamente feliz, algo mas sociable y no actuarias como un gilipollas con síndrome post menstrual, claro la idiota Tanya siempre preocupada por ti, el imbécil más grande del mundo, es imposible que no sepas lo que en realidad siempre he deseado— casi grito lo último, ahora si estaba hecho un lio, acaso Tanya no había deseado siempre a Edward?
ALEX P.O.V:
Intentaba consolar a Bella pero no resultaba sus lágrimas estaban empapando mi jersey. Empezaba a preocuparme.- Bella tranquila, de verdad, todo saldrá bien, no sé qué es lo que ocurre pero seguramente se arreglará ya lo verás.- Bella asintió entre lágrimas. Unos pasos nos distrajeron.- ¡Carlisle!- Dijo Bella sorprendida.- Bella, deber venir con migo un segundo, por favor.- Carlisle, el líder de los Cullen era realmente amable y educado. Bella se levantó.- Perdona Alex, luego seguimos hablando ¿de acuerdo?- asentí con la cabeza. Estaba preocupada. Vi como mi prima se alejaba. Me incorporé y empecé a andar mientras daba pataditas a una piedra- ¿Qué le ocurrirá a Bella?- me preguntaba una y otra vez.- ¡Cómo sea culpa de ese vampiro …!- Gruñí. De pronto detrás de un arbusto vi a Tanya y a Andrew. Me quedé para observar e intentar escuchar alguna cosa para poder descubrir qué diablos le pasaba a mi prima.
ANDREW P.O.V:
—Podrías calmarte por favor, de verdad tus gritos deberían ser tu don, son capaz de desgarra el cerebro— dije ahora divertido mientras me ponía de pie y me acercaba a ella—Ok si no has deseado a Edward todo este tiempo, entonces que es lo que de verdad has querido?— por mero impulso la había atraído a mis brazos, hablaba mientras la abrazaba en un esfuerzo por calmarla—de verdad eres un tarado, Andrew solo he deseado estar cerca de ti, ayudarte y saber por qué sufres, pero eres un estúpido y no te das cuenta o más bien no lo quieres aceptar— dijo contra mi pecho ocultando su rostro, la expresión tierna de Tanya me desarmo, como una mujer tan poderosa como ella podía entibiar mi corazón?, lentamente la separe de mi lo justo para volver a sentarme con ella a mi lado, no sabía porque pero justo ahora se me antojaba ser estúpido y confiar en ella mañana te traicionara, se burlara de tu dolor, nadie jamás podrá quererte si mucho solo compadecerte, volvió a urgir mi mente.—Sabes que jamás te traicionaría, de verdad Andrew, confía en mi, te juro que yo no hare nada contra ti, confía en mi hacia como lo hiciste en Bella— pude ver como el hecho de que hubiese hablado con Bella la hería y el hombre que vivía en mi, aquel que todavía tenias suelos y no deseaba desconfiar de los demás se odio por causarle dolor—Tanya sabes lo que es vivir solo, lo que es ser repudiado, ser solo una paria a quien todos temen o desprecian?— Tanya me atrajo a sus brazos y me sostuvo ahí mientras hablaba, no me derrumbaría, años siendo insensible me daban la tranquilidad para describirle el horror de ser yo con clama—Ver a Alex solo hizo que los recuerdos enterrados surgieran, recordé el humano infeliz que fui, el ser despreciable que soy y lo cabreado que me pone no ser merecedor de el menor cariño de nadie, Bella ama a Edward a pesar de que sea un completo tarado, cretino y seudo emo, Steve a descubierto en Clarise la parte que le faltaba, pero mi destino solo es caminar oscilando entre dos mundos, no pertenecer a ninguno y ser repudiado por todos, ni los Volturis me desean cerca, me consideran una amenaza que exterminar y créeme gustoso les hubiese dejado hacerlo, pero Steve me necesita y me niego a dejar que desprotegido a mi hermano, sin mí el siendo tan…confiado seria presa fácil y ahora también debo proteger a Clarise ya que ella es su felicidad— esperaba que Tanya se burlara de mi debilidad, sin duda en mi tiempo un hombre como yo no tenía derecho a ser vulnerable y ahora mi única defensa contra los demás era mi sobriedad, no podía derrumbarme de esta forma, peor ella solo seguía sosteniéndome, delicadamente acariciaba mi rostro —Andrew, tu vida ha sido dura, mereces amor, eres la mejor persona que puede haber, no es justo lo que te ha pasado— esas palabras eran sinceras, podía ver en lo más hondo de sus ojos que de verdad lo sentía sí, pero yo mereciendo felicidad, eso casi me hizo reír, la vida me había enseñado que yo solo podría tener dolor y destrucción—¿Por qué me escuchas, por qué haces esto por mi?— pregunte antes de poder contenerme.—Porque desde hace décadas, desde que nuestros caminos se cruzaron en aquel bosque desee sentirte así, entre mis brazos siendo sincero y que yo pudiera aliviar el dolor que te embarga— quería creerle, más que querer necesitaba hacerlo, pero bien sabía yo que no era posible, este momento solo era una tregua con el destino, una tregua corta que ahora había decidido aprovechar—sabes que detono todo el dolor que trato de guardar?...las palabras de Alex, ella no confía en mí y eso me dolió de forma inexplicable, no entiendo porque, pero siento que es Amanda quien no confía en el monstruo que soy, debería matar a Bella, pero ahora temo no ser capaz, solo deseo protegerla y antes de que pienses lo que no es, no es por amor, es por fraternidad, ella es pura y leal nadie merece morir por eso y Alex ella de extraña manera es Amanda solo que un poco mas terca, he decidido defender a las dos con mi vida de ser preciso, se que ante los Volturis no podrán hacer nada y aunque se me vaya la eternidad en ello, aunque me repudien las protegeré— Afirme cada vez más convencido mientras las palabras salían como la peor confesión de mi boca.—Ya no deseas acabar con Edward?—pregunto extrañada Tanya—Si acabar con el implica destruir a Bella, Alex o Clarise de cualquier forma, entonces no, Edward seguirá respirando mientras para ellas el sea importante— le asegure, por más que detestara la idea ese era el único camino que me quedaba, Eres un idiota, los demás no han tenido consideraciones con tigo, porque deberías tenerlas tu? Grito el monstruo vil en mi interior, pero yo sabía bien la respuesta, de actuar de otra forma en verdad habría perdido mi humanidad y por extraño que pareciera aun trataba de aférrame al poco de bondad que tenia.en ese momento el crujir de una rama hizo que me alejara de los brazos de Tanya, al voltear la vista pude ver a Alex de pie junto a nosotros—Que haces ahí, no sabes que espiar es de mal gusto?— pregunte tratando de retomar como siempre mi presencia hostil Tanya se incorporo no sin antes besar mi mejilla —Estaré cerca, creo que ahora debes hablar con ella —me susurró. -Esto... yo, siento haver escuchado, ya... ya me voy…- Alex y yo nos quedamos observándonos. Agaché la mirada.- ¿Qué es lo que has escuchado?- oh, bueno, yo... No escuché nada ... estoy medio sorda y pues ... ¡¡¡¡¡¡ADIOS!!!!!!!- vi como se alejaba. Logré alcanzarla y la agarré.- No mientes muy bien que digamos.- La miré. Era tan igual a Amanda que tragué saliva.- Ahora, sin mentiras, dime que escuchaste.- Siento haberte hecho sentir de esa forma, fui injusta, a Steve, bueno a él si le di una oportunidad y a ti en cambio ... perdona- Agachó la mirada. Emití una carcajada-tranquila Alex, ¿por qué ibas a darme una oportunidad?, no es como si fuera nuevo el repudio general para mí- Alex me miró-pues... porque no es justo darle oportunidades a todos menos a otro por ... *agacha la mirada* por ser distinto...En fin *suspira* Perdona ... a veces me encierro y no veo más allá de mis narices es un maldito defecto que tengo ... lo siento...pero ... ¿Has probado de no amargarte a ti mismo? Te iría mejor- Se tapó la boca- Vaya, perdón otra vez.- Me reí de nuevo. -perdón pequeña, es solo que eres mas simpática de lo que pretendes, seria..diferente "no amargarme" pero sin duda esa no es una opción para mi, escuchaste un poco de mi vida sabes que los demás no me permiten relajarme- —Mira no todos son malos, acaso alguna vez has intentado sonreír de verdad, vamos no es tan malo— y mientras hablaba situó sus dedos en la comisura de mi labios mientras los retiraba y trataba de formar una sonrisa en mi rostro, su gesto me petrifico, me hizo vagar siglos atrás cuando Amanda usaba sus mismas expresiones y tras un arduo día efectuaba el mismo gesto para alegrarme, impulsivamente la atraje a mi brazos, la acune contra mi pecho, esto no podía ser real, ella era Amanda, no era un simple parecido, cada gesto, cada palabra llevaba la esencia de mi hermana.
(Idea original de Stephanie Meyer// Idea del Fic: Ann, Vero y Ale)
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