MIRADAS (parte 5)

viernes, 20 de junio de 2008

 


JACOB P.O.V:

Ok, esto era normal, otro día, otra salida a patrullar para asegúranos que las sanguijuelas no cruzaran la línea, todo iba bien hasta que sentimos el olor de un chupasangre, un vampiro traspasando los limites, ardía en deseos que fuera Edward ”perfectillo” Cullen para poder acabar con él, aunque conociéndolo lo dudaba pronto Sam nos dio las muy fastidiosas ordenes mentales y emprendimos camino, pero cuando llegamos otro olor viajaba por el aire, era un olor familiar…muy familiar de hecho, pero no podía identificarlo; solo vimos imponentes 4 siluetas de pie a nuestro lado de la línea, una era Bella, cuando la vi nada más importo, Sam se acerco a los recién llegados gruñendo, yo como siempre solo podía mira a Bella, mi fruta prohibida y por tanto más deliciosa, me acerque a ella pero mi camino fue interrumpido cuando una encantadora voz dijo “somos cazadores” cazadores eso no podía ser, esas criaturas hechas para exterminarnos así como nosotros lo hacíamos con los vampiros, Sam rugió molesto, todos estábamos listos para atacar, pero pronto la voz prosiguió, “no les haremos daño”, si era así ¿qué demonios querían?, y más importante aun: ¿qué hacia Bella con ellos?... Me dirigí a Bella que me regalo una tierna sonrisa y yo aun en forma de lobo podía poner mi habitual cara de baboso cuando la veía, ella me acaricio y estaba feliz cerca de ella cuando escuche como en un susurro, “Jacob” mi nombre dicho con aquella misma voz, la de la cazadora, la que voltee a mirar y se me hizo conocida, recuerdos luchaban por salir a flote pero no lo lograba, hasta que me perdí en su mirada y la reconocí…Alex, después de muchos años era ella, de nuevo ella. Pero debía mantener la calma estaba delante de Bella y no era bueno que me viera descontrolado por otra mujer diferente a ella, si algún día quería que dejara ala sanguijuela debía seguir demostrándole que en mi corazón solo ella cabía, aunque ahora hubiera regresado esa hermosa niña, un poco más crecida y sin duda mucho más interesante..MIA .. Salto esa palabra dentro de mí con solo observar a la cazadora, pero jamás entendí porque, era mejor alejar mis ojos y mi mente de ella debía concentrarme en Bella.

ALEX P.O.V:

Era el sin duda era Jake, mi mente me lo decía y mas fuerte mis instintos, mi maldita imprimación hizo que saltaran todas las hormonas dentro de mí, el se fijo en mí, me miro y ahí estaba debatiéndose entre recordar lo que era para él; o permanecer alejado, pero sin duda gano sus ganas de estar con ella, mi prima, la que tenía un perfecto novio vampiro y aun así estaba junto a mi lobo, una ira profunda surgió en mi ser, pero no, debía disimular ahora debía estar pendiente de licántropos exaltados y de Clarise que se acercaba, no tenía tiempo para mi dolor personal, un dolor con dos nombres JACOB Y BELLA.

CLARISE P.O.V:

La ponzoña aumentaba, el vacio en mi estomago era más grande y la quemazón en mi garganta insoportable, como podían vivir las sanguijuelas con esto, sin duda su maldita vida tampoco era Difícil…error ya no era SU, ya era NUESTRA, porque ahora yo era un parasito mas y uno que ahora estaba hambriento y necesitaba beber y beber sangre, sin duda sería mucho más poderosa luego de alimentarme, por lo menos tenia poderes muy guay, esa era la parte buena del trato, prefería no detenerme a pensar en las desventajas, estaba dispuesta amatar lo primero que se me atravesara, pero genial, ahora el aroma de mis hermanos era más fuerte y repelente los licántropos olían igual, debía escapar todos estaba cerca, Alex debió ver que me escapaba, ahora sería difícil tener hermanos cazadores y uno licántropo, que adorable familia….me agazape para iniciar mi carrera pero un rugido feroz se oyó demasiado cerca de mí, gire ahí lo tenía, un gran lobo negro mirándome, esto era simplemente perfecto.

ERIC P.O.V:

Mientras mirábamos extrañados a mi hermana y a el gran lobo rojizo, una esencia se hizo más fuerte, .—Clarise— grite, mi hermana estaba cerca, rápidamente me gire hacia el lobo negra que era a todas voces, el lobo Alfa pronto le explique mejor lo que Alex burdamente le había dicho, pero no terminé de vocifera cuando ya todos la manada había salido a la caza d mi hermana, pronto materializamos las espadas y los perseguimos, claro no sin antes recoger a Bella ”solo una humana” en medio de nosotros, aun no sé por qué la trajimos.

ALEX P.O.V:

De pronto un aroma se apoderó de mi, desvié la mirada de los ojos penetrantes de Jacob - ¡No!- grité asustada, corrí desenvainando mi espada hacia el lobo negro, le barre el paso con la ayuda de Joni-¡Maldito Perro!- Chilló mi hermano. Clarise estaba justo detrás nuestro, noté como Joni la mantenía controlada con su increíble don. De pronto al lado de ese enorme lobo negro se encontraba un lobo blanco con expresión feroz,- ¡Eric!- exclame, pero entonces lo comprendí todo, Eric intentaba comunicarse con los lobos, en su mirada podía ver la suplica, el ruego, por que dejaran viva a Clarise. El gran lobo negro se inclinó para observarme , después miró a Joni y volvió a mirar a Eric, hizo una señal y los lobos retrocedieron, todos menos uno, un gran lobo de pelaje gris un tanto despeinado se abalanzó sobre Clarise, era el lobo más inestable de la manada, de pronto todos los lobos se pusieron de nuevo en posición de ataque. Mi hermana saltó hacia un árbol, vi en su cara la furia y la sed, Joni cayó rendido, no estaba acostumbrado a paralizar a un neófito, miré al lobo blanco que me suplicaba que hiciera algo, ya que él no se atrevía a acervarse a mí recién convertida hermana, por miedo a dañarla. Miré fijamente al lobo gris y empecé a susurrar una canción, vi como se calmaba, pero no me podía fiar, ese lobo era demasiado inestable, demasiado peligroso, supe que debía alejar a mi hermana de allí, la observé pero la vi totalmente paralizada, asustada, y … sedienta. De pronto algo llamo su atención, Clarise clavó la mirada en un punto fijo, clavó la mirada en Bella, su mirada de temor pasó a ser de ansia, de hambre, de sed.

EDWARD P.O.V:

No era posible, ese aroma, ese dulce olor…- ¡Bella!- Chillé, mientras corríamos en busca del neófito. ¿Cómo era posible que mi dulce meteoro estuviera cerca de un monstruo sediento de sangre? … aun que no era el más indicado para decir aquello. Corrí con más fuerza que nunca, Jasper y Carlisle me acompañaban, podía oler el miedo de mi dulce niña. Los aromas se mezclaron, podía oler el horrible aroma que desprendían los licántropos, los pensamientos de los primos de Bella, sin lugar a dudas ellos eran los culpables de que mi vida estuviera en peligro, y por último el aroma del neófito. Las sombras se hicieron visibles, pude ver a Bella con cara de pánico, de pronto una sobra se abalanzó contra ella, corrí y salté sobre ella, un gran lobo rojizo se puso frente a Bella. Forcejeé con el neófito hasta que por una extraña razón, bueno, la verdad no tan extraña se calmó; Jasper había llegado.

BELLA P.O.V:

Todo fue muy rápido, el miedo se apoderó de mí, cerré los ojos esperando el ataque … no ocurrió nada, de pronto abrí los ojos muy lentamente, todos miraban hacía una dirección, los imité. -¡Edward!- ¿Cómo era posible? Mi salvador se encontraba luchando contra un neófito, con mi prima, no quería que ninguno de los dos sufriera ningún daño- ¡Por favor, parad!- susurré sin fuerzas. De pronto todo cesó, mi prima dejó de moverse, y Edward corrió hacia mí, no me había percatado que un lobo rojizo se encontraba justo a mi lado.-¿Estás bien?- dijo una voz absolutamente perfecta y terciopelada; Edward se encontraba entrelazando su cuerpo al mío, abrazándome, lo aprisioné con fuerza hacía mi.-Si ahora estoy perfectamente!- le aseguré, y es que si él estaba a mi lado nada importaba, solo él y yo. De pronto se separó de mí, algo llamo la atención de él.- ¿Edward?- mi miró con una expresión seria y preocupante. Carlisle estaba sujetando a Jasper y a juzgar por la ausencia de movimiento en su tripa, no estaba respirando, Jasper tenía una expresión que me era familiar estaba sediento, pero … ¿Por qué? … ¿Qué demonios le había hecho despertar su sed?. De pronto oí una voz- ¡No, Alex, no lo hagas!- ¿Alex? … ¿qué demonios estaba pasando?- ¡Es la única manera de alejarla del territorio Quileute!- chilló mi prima, al juzgar por la lejanía de los chillidos, mi prima estaba corriendo y alejándose cada vez más, Joni salió en su ayuda, mire a Edward asustada y me acurruque en su pecho, miré a donde hacía un segundo estaba mi prima … Abrí los ojos de par en par. De pronto lo entendí todo.



(Idea original de Stephanie Meyer// Idea del Fic: Ann, Vero y Ale)

1 comentarios:

Anónimo dijo...

ayyy q pasa? no me entere al final Q ocurre? seguid escribiendo plis!!
bessos